Los sistemas de control de errantes aportan tranquilidad a los familiares e incluso permiten mejorar la organización de trabajo en los centros de mayores.
Poco a poco se está consiguiendo su implementación en la mayoría de las residencias de la tercera edad gracias a su rápida adaptación a las necesidades específicas de cada residencia y de las personas mayores que los utilizan diariamente.
Aunque no estamos hablando de un sistema nuevo, sí que es cierto que los materiales y la tecnología que emplea está constantemente evolucionando.
El control de errantes en un centro de mayores es una pieza fundamental dentro del control y la seguridad que se debe prestar a los usuarios.