Esta semana retomamos uno de los dispositivos idóneos para el control nocturno de los pacientes o residentes, el sensor de cama.
El sensor ha sido diseñado para alertar de la presencia o ausencia del residente en la cama. Permite alertar a los profesionales cuando un residente abandone su cama en un tiempo configurable.
El sensor incluso permite dos tipos de configuración en función de la movilidad de cada residente. Cuando un paciente son movilidad limitada, se ausenta de la cama se enviará una alarma en el mismo instante del abandono de la cama, permitiendo actuar anticipándose a cualquier daño que pudiese ocurrir.
Y en los casos de pacientes con capacidad de movimiento, se establece un tiempo lógico de retorno, enviando la alarma si la persona no vuelve en el tiempo establecido.
El sensor no requiere ningún tipo de instalación al ser un dispositivo inalámbrico, sólo necesita para su funcionamiento una pila AAA.